Camilo Ochoa Delgado, el Influencer y Youtuber conocido en redes sociales como “El Alucín”, fue ejecutado por al menos un Sicario en el baño de su casa de Temixco, Morelos, en un hecho que ha sacudido la esfera digital y el mundo del crimen organizado.
El presunto narcotraficante, quien tenía 42 años de edad, había subido su último video a Instagram horas antes de su muerte, en el que de forma irónica se quejaba de no saber qué atuendo usar debido a su extenso guardarropa.
El crimen ocurrió alrededor de las 16:59 horas del sábado 16 de agosto en el fraccionamiento Lomas de Cuernavaca, un Sicario irrumpió en su casa y le disparó en varias ocasiones.
El cuerpo de Ochoa fue encontrado sin vida en el baño, donde aparentemente intentó refugiarse, como lo demuestran los múltiples impactos de bala en la puerta de madera, su esposa de 32 años, fue quien dio aviso a las autoridades.
La vida de Camilo Ochoa era una mezcla de lujos y actividad criminal, era sobrino e hijo de los fundadores de la exitosa cadena de restaurantes El Pollo Loco en Guasave, Sinaloa, un negocio que hizo millonaria a su familia.
A pesar de haber crecido en la opulencia, Ochoa decidió vincularse con el crimen organizado, confesando que la "adrenalina" de los secuestros lo llevó a unirse al Cártel de Sinaloa en 2014.
En el cártel, llegó a ser jefe de plaza en Mazatlán y colaborador de Dámaso López Núñez, “El Licenciado”, también se jactaba de ser un traficante independiente con contactos en Colombia, su carrera criminal terminó, según su versión, tras ser detenido en 2015 y sentenciado a siete años de prisión.
La ejecución de Camilo Ochoa no fue una sorpresa para quienes seguían de cerca la situación del crimen organizado en Sinaloa, su nombre apareció en una lista de 25 Influencers lavadores de dinero de Los Chapitos y/o La Chapiza, que fue difundida en volantes lanzados desde avionetas en Culiacán a principios de 2025, varios de los nombres en esa lista ya han sido asesinados.
Ochoa negó las acusaciones de tener vínculos con la facción de “Los Chapitos”, pero en la Narcoguerra entre La Mayiza y La Chapiza, se inclinó por los segundos.
Como parte de las represalias, al menos cinco sucursales de El Pollo Loco en Nuevo León fueron atacadas con bombas incendiarias, en lo que las autoridades presumen fueron actos relacionados con su persona.
Advertisement