Una ola de violencia ha sacudido al estado de Guerrero, dejando un saldo de al menos 15 personas muertas en un periodo de 24 horas.
Los crímenes se han concentrado en Acapulco y Chilpancingo, y ocurrieron de manera simultánea a una serie de ataques armados contra sedes de la Fiscalía General del Estado (FGE) en el puerto.
El jueves, Acapulco registró 13 homicidios con un alto grado de violencia, de acuerdo con fuentes de seguridad. Los cuerpos presentaban diversos tipos de lesiones: siete fueron ultimados con torniquete en el cuello, tres decapitados y otros tres a balazos.
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Los hallazgos se sucedieron a lo largo del día en diversas colonias:
- En la madrugada, se encontró el cuerpo decapitado de un hombre envuelto en sábanas en la colonia Ciudad Renacimiento.
- Horas más tarde, los cuerpos torturados de un hombre y una mujer fueron dejados en la cajuela de un taxi en la colonia Las Cruces.
- Posteriormente, otro taxi abandonado en la colonia Ciudad Renacimiento reveló los cuerpos decapitados de dos hombres, mientras la alcaldesa Abelina López Rodríguez encabezaba un evento público en la zona.
- En la tarde y noche, se reportaron otros homicidios en distintas colonias, incluyendo el de cuatro hombres hallados en el fraccionamiento Mozimba, quienes estaban atados de pies y manos, torturados y asfixiados con torniquete.
Esta escalada de crímenes se produce poco después de que tres agencias del Ministerio Público y comandancias de la Policía Investigadora Ministerial de la FGE en Acapulco sufrieran ataques armados.
La madrugada de este viernes, la violencia se extendió a la capital del estado, Chilpancingo. Los cuerpos desmembrados de una pareja fueron hallados a orillas de la autopista del Sol, en el kilómetro 286, cerca de la caseta de cobro Palo Blanco. Este hallazgo eleva a 15 el número de víctimas de la violencia en el estado en un lapso de 24 horas.
En respuesta a los ataques, la FGE de Guerrero ha ofrecido una recompensa de 1 millón de pesos a quien proporcione información que conduzca a la detención de los agresores. Sin embargo, esta medida ha sido duramente criticada.
El exdiputado federal Rubén Cayetano García calificó el ofrecimiento como una "prueba manifiesta de la incapacidad" de la Fiscalía para cumplir con su deber de investigar los delitos. Hizo un llamado a las organizaciones de abogados a pronunciarse sobre lo que considera un "monumental ridículo" de las autoridades.