Un nuevo hecho de violencia se registró la madrugada del jueves a pocos kilómetros de Morelia la capital michoacana, cuando policías municipales de Álvaro Obregón fueron emboscados por un grupo de Sicarios durante un patrullaje en la carretera federal Morelia – Zinapécuaro, a la altura de la comunidad El Calvario.
El ataque ocurrió alrededor de las 02:30 de la mañana cuando una patrulla municipal detectó luces sospechosas en una brecha conocida como Los Armadillos, al intentar verificar, los tripulantes de dos vehículos civiles emprendieron la huida y abrieron fuego contra los agentes, desatando un intercambio de disparos que se extendió por más de cinco minutos.
Tras repeler la agresión, los uniformados aseguraron la zona y hallaron dos automóviles abandonados con múltiples impactos de bala.
 |
| . |
 |
| . |
 |
| . |
 |
| Reportado como robado horas antes |
Los vehículos abandonados resultaron ser claves para la investigación:
- Un Dodge Magnum color negro, sin placas, fue identificado como robado apenas unas horas antes en la localidad de San Lucas Pío, municipio de Indaparapeo, el robo había sido reportado por el propietario en redes sociales menos de 24 horas antes del ataque.
- Un Chevrolet Spark gris oscuro que presentaba varios impactos de arma de fuego en el lado derecho, el parabrisas y la cajuela, además de cartuchos no percutidos en el suelo, ambos vehículos estaban abandonados con las puertas abiertas.
El operativo, encabezado por el director de Seguridad Pública, Cuauhtémoc Godoy López, con apoyo de 14 elementos, se centró en asegurar el área.
El hallazgo a menos de 25 minutos de la capital del estado ha encendido las alertas de seguridad en la región. Las autoridades ministeriales ya investigan el origen de los vehículos y las posibles conexiones con células delictivas que operan en los municipios colindantes con Morelia.