Un juez de control en la ciudad de Monterrey dictó el auto de vinculación a proceso contra Mario Alberto Cárdenas “El Betito”, operador del Cártel del Golfo (CDG) e integrante de la dinastía criminal de los Cárdenas Guillén. El imputado enfrenta cargos por delitos contra la salud y portación ilegal de arma de fuego tras su reciente captura en la capital regiomontana.
La resolución, emitida este 29 de diciembre de 2025, ratifica la legalidad de su detención y establece la medida cautelar de prisión preventiva oficiosa, la cual deberá cumplir en el Centro de Reinserción Social (Cereso) de Apodaca.
La detención de “El Betito” ocurrió el pasado 21 de diciembre en la zona sur de Monterrey. Elementos de la Fuerza Civil de Nuevo León interceptaron al sospechoso en el cruce de las avenidas Lázaro Cárdenas y Alfonso Reyes. En la acción también fueron aprehendidos:
- Raúl Ramírez (45 años).
- Kevin Alberto Castro (19 años): Identificado por las autoridades como posible lugarteniente de la organización.
Al momento de la detencion, los agentes incautaron un arma larga, una corta, dos cargadores, siete cartuchos útiles, 44 dosis de estupefacientes, una báscula digital y dinero en efectivo. Tras la vinculación a proceso, el juzgador fijó un plazo de tres meses para el cierre de la investigación complementaria.
La captura de Mario Alberto Cárdenas no es un hecho aislado. Se suma a la reciente ubicación de Víctor Hugo Cárdenas Lozano, alias “El Betillo”, quien también fue detenido en Monterrey (zona de Sierra Alta) por la Secretaría de Marina.
Para las autoridades federales, la presencia de estos perfiles en Nuevo León responde a la necesidad de la organización de gestionar plazas estratégicas fuera de Tamaulipas, donde mantienen una cruenta disputa por el control de las rutas hacia Estados Unidos.
El proceso contra “El Betito” se desarrolla en medio de una reestructuración forzada del Cártel del Golfo debido a la presión judicial sobre sus líderes:
- José Alfredo Cárdenas Martínez, “El Contador”: El líder de la facción “Ciclones-Escorpiones” permanece bajo la mira del Departamento de Justicia de EE. UU., que solicita su extradición por conspiración internacional para distribuir fentanilo y cocaína.
- Osiel Cárdenas Guillén, “El Mata Amigos”: El fundador de la organización regresó a México deportado el 16 de diciembre de 2024. Actualmente se encuentra recluido en el CEFERESO No. 1 “El Altiplano”, donde enfrenta siete procesos penales pendientes.
Según la Fiscalía General de la República (FGR), Osiel Cárdenas Guillén podría recibir una condena acumulada de hasta 730 años de prisión por delitos que incluyen homicidio calificado y delincuencia organizada.
El Gobierno Federal ha intensificado la vigilancia sobre los colaboradores y familiares de la familia Cárdenas Guillén para impedir que el regreso del histórico capo a territorio mexicano derive en un fortalecimiento de los mandos operativos en la frontera norte.