Un ataque armado durante una carrera de caballos en el municipio de Hidalgo del Parral, Chihuahua, dejó un saldo preliminar de al menos seis personas muertas y once heridas.
El ataque, registrado la tarde del sábado 15 de noviembre, provocó una intensa movilización de cuerpos de seguridad y bloqueos carreteros, manteniendo a la región en estado de alerta.
Los hechos ocurrieron en el Carril Santa Teresa, ubicado en el kilómetro cuatro de la carretera Parral–Jiménez, según testigos y reportes extraoficiales, el ataque comenzó cuando un hombre armado disparó inicialmente contra dos personas que consumían bebidas alcohólicas cerca de una camioneta de lujo.
Posteriormente, un segundo sicario, portando un rifle, abrió fuego indiscriminadamente contra los asistentes, desatando el caos, el carril Santa Teresa es propiedad de Arturo y Augusto Medina, este último diputado y coordinador de legisladores del PRI.
Entre las víctimas mortales se identificó a un hombre apodado Benito, señalado como un lider y objetivo criminal y vinculado con una masacre ocurrida en el carril de carreras de Maturana, donde cuatro personas, incluida una menor de edad, fueron asesinadas.
Algunos heridos intentaron refugiarse en las zonas de monte aledañas, lo que hace temer a las autoridades que la cifra de víctimas fatales pueda incrementarse conforme avancen las labores de búsqueda.
Tras el ataque, la Dirección de Seguridad Pública Municipal, la Guardia Nacional y la Fiscalía General del Estado (FGE) resguardaron el área y activaron un operativo especial en todos los accesos carreteros de la ciudad.
El Gobierno Municipal de Parral emitió un comunicado urgente recomendando a la ciudadanía evitar transitar por la carretera Parral–Jiménez debido a la presencia de grupos armados y las acciones operativas en curso.
Minutos después del incidente, se reportaron bloqueos en la carretera Parral–Jiménez, lo que complicó el tránsito vehicular y generó gran incertidumbre, las autoridades investigan si estos bloqueos fueron planeados para facilitar la huida de los agresores o para desviar la atención.